La misa fue oficiada por el párroco Alexander Castro, en el templo Santa Inés, Patrimonio Cultural de la Nación. En esta eucaristía participaron los directivos de CTur-Sucre y Prestadores de Servicios Turísticos de la ciudad de Cumaná.

El párroco Castro paseó su mensaje bíblico por la reflexión de Jesús de Nazaret, cuando recorría ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio del reino y curando toda enfermedad y toda dolencia: «La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies». De allí el mensaje, de ir sumando voluntades para que trabajemos juntos para levantar de su enfermedad la actividad turística.

Luego de la eucaristía, los integrantes de CTur-Sucre se trasladaron hasta la Plaza Ayacucho donde se encuentra la magnífica estatua ecuestre de Antonio josé de Sucre, cuya construcción fue decretada el 9 de diciembre de 1888, junto con la de la plaza y el parque. En el sitio, se le hizo la ofrenda floral al Mariscal de Ayacucho.

Al respecto, Rosendo Acosta, presidente de CTur-Sucre, refirió que “Rendimos tributo con esta ofrenda floral, con motivo del primer aniversario de CTur-Sucre, al hijo más insigne de Cumaná, uno de los héroes de la independencia latinoamericana más laureados y admirados, vencedor de Ayacucho, la batalla final que consolidó la libertad de América”.

Acosta también acotó que cada día se suman más Prestadores de Servicios Turístico a la causa del gremial de impulsar el turismo en la entidad, y que para el 2020, gracias al entusiasmo y la capacidad de trabajo del equipo directivo que le acompaña, vendrán más acciones que redundará en el continuo y paulatino crecimiento en la llegada de turistas a nuestra región, y enfatizó que “...con la ayuda de Dios, del Mariscal Sucre, y de todas las personas de buena voluntad que nos acompañan, así será”.